La batalla por los puertos se gana en tierra. Este dicho, muy conocido en el pequeño mundo de la cadena de suministro, se está verificando actualmente en los puertos del Mediterráneo, en pugna por desarrollar modos masivos. El puerto de Barcelona lanzó una operación de seducción para atraer la atención de los clientes franceses en presencia de la Región Occitania, el 3 de septiembre, en los edificios históricos de Tinglados, especialmente renovados para acoger la Copa América.
250 transportistas y transitarios fueron invitados a subir al tren del Día de Francia, organizado por el puerto de Barcelona en el marco de las festividades de la prestigiosa 37ª America’s Cup. Las sesenta empresas presentes participaron en una mesa redonda en el World Trade Center titulada “Próxima parada: Puerto de Barcelona”.
El presidente del puerto, Luís Salvado, explicó la necesidad de descarbonizar las actividades marítimas y portuarias utilizando varias palancas: equipos eléctricos en el muelle para conectar los barcos en el puerto (dispositivo que será obligatorio en 2030) y el desarrollo de servicios ferroviarios para reducir el número de vehículos pesados en las carreteras. “En Hamburgo el 50% de las mercancías llegan y salen por ferrocarril.
Los puertos del Mediterráneo están lejos de esta realidad. Barcelona tiene una tasa de cambio modal del 14%. La colaboración a ambas orillas de los Pirineos es fundamental para desarrollar servicios alternativos a la carretera. Cada día cruzan la frontera 10.000 vehículos pesados”, explica Luís Salvado. Estrecha colaboración, en particular con Occitania.
“Necesitamos pensar en una solución a la escala del Mediterráneo occidental”
“Nuestra presencia en Barcelona es natural porque tenemos vínculos muy fuertes y duraderos con Cataluña. Cooperamos en el marco de la zona del euro y hemos renovado acuerdos transfronterizos en materia de transición energética, transporte, cuestiones marítimas y portuarias. Las condiciones de circulación de trenes entre Francia y España son cuestiones antiguas que requieren una respuesta europea y mucho dinero. Queremos avanzar juntos en este tema. Debemos pensar en una solución a escala del Mediterráneo occidental”, subraya Sébastien Denaja, asesor regional para Occitania, delegado en Europa e internacionalmente.
En noviembre de 2023, los primeros trenes de mercancías directos (750 m de longitud), transportados por Captrain entre Francia y España, finalmente cambiaron las reglas del juego para los transportistas que ofrecen la capacidad de conectar Barcelona con Toulouse y Barcelona con Lyon. Los servicios de transporte de contenedores y cajas móviles marítimos y continentales son el resultado de la colaboración entre numerosos socios: la amateur Maersk – apoyada por su empresa matriz APMT que explota una terminal en Zaragoza, Synergy (filial logística de la empresa de manutención de Singapur Hutchison) que opera la terminal de contenedores BEST y las compañías ferroviarias francesas Naviland Cargo y Combronde.
APMT ha desarrollado una red ferroviaria en España. Cada semana, el gigante danés opera 25 conexiones ferroviarias de mercancías entre Barcelona y Zaragoza, 12 trenes entre Barcelona y Tarragona, 6 trenes entre Algeciras y Madrid y también 2 trenes que conectan Barcelona con Bilbao.
El tren, palanca para los transportistas eco-responsables
Para los transportistas, particularmente aquellos involucrados en las exportaciones, estos servicios directos son una oportunidad. La Compagnie des Pyrénées, fundada en 2020 en Merens-les-Vals, embotella agua mineral natural bajo la marca “Eau Neuve”, presente especialmente a bordo de los TGV. La empresa que utiliza contenedores ecorresponsables también quiere actuar en el ámbito del transporte. Está estudiando la posibilidad de transportar sus botellas por ferrocarril hasta Toulouse.
“Vinimos a descubrir todas las oportunidades de transporte en el puerto de Barcelona. Con el desarrollo de las exportaciones en Asia, Estados Unidos y Medio Oriente, es importante conocer nuevos proveedores de servicios. El puerto de Barcelona está a menos de dos horas de nuestra fábrica en Alto Ariège. Esto nos permite trabajar en el aspecto ecológico y eco-responsable de nuestro transporte. Utilizamos tracción por camión con un socio equipado con combustible B 100, utilizamos transporte nacional”, explica Sébastien Crussol, presidente fundador de La Compagnie des Pyrénées.
La empresa, que vendió 32 millones de botellas en 2023, tiene como objetivo entre 40 y 45 millones de botellas. Del 3% de su facturación en exportaciones, aspira a exportar entre el 10 y el 15% a nivel internacional en dos años con puntos de venta en Dubai y Arabia Saudita.
Sogo Green, importador de paneles fotovoltaicos de China, prefirió Barcelona a Le Havre y Fos en 2021 por su fiabilidad. “Tomamos esta decisión en un momento en que el puerto de Marsella-Fos estaba en huelga. Barcelona ofrece un tiempo de tránsito reducido de 5 días con Le Havre”, subraya Bruno Dufau, presidente de Sogo Green.
Con sede en Herm, en las Landas, Sogo Green importa diez contenedores al año que, una vez descargados de los barcos en Barcelona, toman el tren hasta Pamplona y la carretera para el tramo final.
El puerto de Barcelona, que gestionó un flujo de 3,5 millones de contenedores en 2023, apunta a 4 millones este año. Debido a los ataques hutíes en el Canal de Suez, el tráfico marítimo se desvía hacia el puerto catalán.
“Nuestro tráfico de contenedores aumentó un 23% en el primer semestre de 2024 hasta alcanzar los 2 M TEU, lo que sugiere más de 4 M TEU para el año”, concluye Carla Salvado. Para el director comercial del puerto de Barcelona, la ambición es clara: ampliar el interior del puerto hacia Toulouse, Burdeos y llegar al mercado europeo.
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